Ya hemos hablado mucho de los avances tecnológicos desenfrenados que obviamente traen muchas cosas buenas al mundo, pero que también traen consigo algunos cambios negativos, como es el caso de la forma en la que se vive la infancia hoy en día.

Si eres de los años 90 o antes, seguramente recordarás una infancia difícil, pero llena de diversión; Nos costó mucha creatividad divertirnos, ya que no podíamos contar con la tecnología, pero creo que la infancia fue mucho más interesante... Jugábamos en el barro, jugábamos a la pelota en la calle y todos esos juegos que no necesitábamos casi nada para hacer, vivíamos mucho más con la naturaleza y sin contar que teníamos más contacto con los amigos, que siempre nos reuníamos en la calle.

Hoy en día, todo parece depender de la tecnología y, si bien puede acercar a las personas, también puede separarlas por conveniencia. Está claro que la infancia ya no es la misma, hecho que fue constatado por la fotógrafa Niki Boon cuando decidió dejar todo atrás y mudarse a una granja en Nueva Zelanda. Fue entonces cuando empezó a notar los cambios de hábitos de sus hijos y estaba seguro de que podrían divertirse incluso lejos de los videojuegos.

Compruébalo a continuación:

Síguenos en las redes sociales:

Facebook: Nandy Martins

Instagram: @nandy_martins